La línea de pobreza es conocida también como umbral de pobreza. Por debajo de la cuantía que se fije como línea de pobreza, una persona es pobre.
La línea de pobreza, como cabría esperar, cambia de unas zonas geográficas a otras. Una persona puede ser rica en su país, y pobre en otro. Por tanto, los organismos que la calculan deben tener en cuenta este tipo de datos.
En consecuencia, para entender bien el término es necesario entender cómo se calcula, cómo se interpreta y de qué depende. Adicionalmente añadiremos un último apartado en el que explicamos qué diferencia hay entre línea de pobreza, pobreza extrema y riesgo de pobreza.
¿Cómo se calcula la línea de pobreza?
La línea de pobreza se calcula teniendo en cuenta el poder adquisitivo necesario para satisfacer las necesidades básicas en una zona determinada. Así, si para satisfacer las necesidades básicas en un país A, necesitamos como mínimo 5 dólares al día, esa será la línea de pobreza.
Es decir, la línea de pobreza es la cuantía monetaria mínima para poder satisfacer las necesidades básicas de un adulto. Entre estas necesidades básicas se encuentran el alimento, el acceso a la vivienda, a la educación, a la asistencia sanitaria, disponibilidad de agua potable y electricidad.
La cuantía suele ser expresada en paridad de poder adquisitivo (PPA) y diaria. Es decir, que calcula lo que se necesita para satisfacer dichas necesidades durante un año (en promedio) y luego se pasa a una magnitud diaria. Al mismo tiempo, se tiene en cuenta la inflación y el tipo de cambio para que la medida refleje lo mejor posible la realidad.
Actualmente, el organismo con mayor fiabilidad a este respecto (Banco Mundial) establece que la línea de pobreza se encuentra en $3,20 PPA al día para países de ingresos medianos-bajos y de $5,5 PPA/día para países de ingresos medianos-altos.
Interpretación de la línea de pobreza
Aunque la línea de pobreza expresa una cuantía monetaria, lo que realmente nos interesa es saber qué porcentaje de la población está por encima o por debajo de dicha línea.
En los datos que suelen ofrecer los organismos sobre pobreza, lo que indican es el porcentaje de la población que se encuentra por debajo de esta línea. Si nos indican que hay un 20% por debajo de la línea de la pobreza, quiere decir que existe un 20% de la población que no alcanza esos $3,20 PPA/día y no puede satisfacer todas sus necesidades básicas. Esto se conoce como tasa de incidencia de la pobreza.
No obstante, hemos de tener en cuenta que esta medida no es perfecta. Por ejemplo, si la población está compuesta por 30 millones de personas y 29 millones está en $3,21 PPA/día los datos arrojarán que únicamente el 3,3% de la población es pobre. Sin embargo, estos datos podrían ser radicalmente contrarios si el ingreso fuera 2 centavos menor.
En el Perú
El INEI precisó que, la Línea de Pobreza es el equivalente monetario al costo de una canasta básica de consumo de alimentos y no alimentos, que para el año 2020 asciende a S/ 360 mensuales por habitante, la persona cuyo gasto mensual es menor a S/ 360 es considerada pobre; para una familia de cuatro miembros el costo de una canasta básica de consumo es de S/. 1 440 mensual. Asimismo, la Línea de Pobreza Extrema, considera a la población cuyo gasto por habitante no cubre el costo de la canasta básica de consumo alimentaria, que para el año 2020 se calcula en S/ 191 mensuales por persona, considerándose pobres extremos a las personas cuyo gasto mensual no cubre el valor de la canasta básica de consumo alimentaria; para una familia de cuatro miembros asciende a S/. 764 mensual.
La medición de la pobreza en el Perú se efectúa a través del gasto, ya que esta variable se aproxima a una cuantificación de los niveles de vida de lo que las personas y los hogares consumen, compran y adquieren.