El último informe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) dio a conocer que en el mes de mayo el Índice de Precios al Consumidor subió en un 0.36% revelando así que la inflación anual en el Perú subió a 8.78%, considerada como la cifra más alta en los últimos 10 años. En este informe la entidad muestra que la variación porcentual de precios tuvo mayor incidencia en los siguientes productos: Pasaje en ómnibus y microbús en 3.84%, Menú en restaurante 1.41%, Gasolina en 6.13%, Pasaje en combi en 3.49% y por último la electricidad residencial en 0.96%. Pero ¿Qué es el Índice de Precios al Consumidor a Nivel Nacional? Según el INEI es un indicador estadístico que mide el comportamiento promedio de precios, de un periodo a otro de un conjunto de productos que forman parte de la canasta de consumo familiar.
Las causas de esta inflación local y mundial se ven representadas por el impacto de la pandemia a raíz del COVID 19, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania y factores externos en la economía. Primeramente, a raíz de las medidas de confinamiento en la economía las tasas de interés en el mundo disminuyeron hasta en un 0.25% como fue el caso de la FED 0, lo mismo para nuestra economía en el que el BCRP ubico la tasa en 0.25%, sin embargo en línea con la reactivación económica y para mitigar los efectos de esta medida los bancos centrales han ido subiendo estas tasas, por ejemplo, en esta semana el BCRP tuvo un aumento por onceava vez para mitigar los efectos de la inflación Incrementando en 50 puntos básicos, pasando de 5% a 5.5%, alineados con los otros bancos centrales que buscan endurecer sus políticas monetarias. Asimismo, la OCDE insta a la cautela e indica que “Los bancos centrales tendrán a lograr un delicado equilibrio entre mantener la inflación bajo control junto con el repunte económico posterior a la pandemia”. Según Bloomberg, se prevé que el incremento de esta tasa continuaría hasta Julio de este año, mientras se dé una tendencia decreciente en la inflación.
Conflictos Internacionales
El medio internacional The Economist, hace referencia al impacto del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania en los precios internacionales, Rusia es uno de los principales exportadores de combustibles y cereales, y un principal productor de fertilizantes, además de ello ambos países suministran el 28% del trigo comercializado a nivel mundial, 29% de la cebada, 15% del maíz y el 75% del aceite de girasol, a consecuencia de la guerra la cosecha de estos productos se vio afectado significativamente. Y a raíz de los fenómenos climatológicos la producción de trigo en China y la India se vieron afectados negativamente.
El Perú al ser un importador neto de los cereales como trigo, maíz y la soya ha sufrido un impacto grave en los costos y precios en la canasta familiar de los más pobres, sumado a este factor los precios del petróleo volvieron a dispararse superando los US$ 120 por barril, lo cual se refleja en el último reporte de inflación.
Finalmente la crisis de fertilizantes ha estado poniendo en mira a las economías, dado el temor por los efectos que esta pueda ocasionar, ya que los agricultores están enfrentando costos elevados en energía e insumos, y que la ONU menciona que la falta de fertilizantes puede agudizar la crisis alimentaria en 2023, de acuerdo, al documento “Panorama Nacional e internacional del mercado de fertilizantes inorgánicos”, elaborado por Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) en el presente año, la mayoría de los fertilizantes que se utilizan en la agricultura son de origen importado, siendo Rusia unos de los principales países de origen, seguido de China, que debido a las medidas de confinamiento ha restringido sus exportaciones en urea. Debido a esta preocupación el Perú ha dispuesto la compra de estos fertilizantes en aproximadamente el 70% que se usa en el rubro agrario, la adquisición tiene un costo de 348 millones de soles, esta medida tiene como objetivo subsidiar la compra de lo contrario habría disminución en la producción y con ello el alza de precios de los alimentos aumentaría más de lo que se ha estado viendo, sin embargo, tensiones políticas aún no permiten que esta medida pueda concluirse.